SEO/BirdLife anima a la ciudadanía a observar las aves que están en migración, un proceso fundamental para conocer el funcionamiento de los ecosistemas. Termina el verano y el bullicioso jirriar de vencejos ha desaparecido de las ciudades y pueblos y cientos de miles de aves han comenzado a atravesar el Estrecho de Gibraltar rumbo a latitudes más bajas, donde tendrán la alimentación asegurada durante los meses de invierno boreal.
Comentarios
Ey, que muchas se van...
Para mí los sonidos del vencejos son el recuerdo y la promesa del verano. Siempre me da bajoncillo cuando se van.
Muy bien. Hay que controlar la migración y tal...
luego si os caga un pájaro en el ojo no quiero quejas