Hace 9 años | Por nilien a eldiario.es
Publicado hace 9 años por nilien a eldiario.es

El exdirector del CENDEAC habla sobre su trabajo al frente de la institución, su intento de cambiar el modelo de gestión, los proyectos que llevó a cabo y su polémica salida, pocos días después del congreso al que acudió Íñigo Errejón

Comentarios

Nova6K0

Pero parece que no hay unión en el mundo de la cultura, y que los recortes y los problemas que afectan a este sector no logran movilizar a la ciudadanía, como sí ha pasado con otros sectores y otras profesiones.

Tiene fácil explicación. Cuando algunos hablan de Cultura, se refieren a propiedad intelectual y a dinero contante y sonante, además de una serie de privilegios. La gente no se moviliza porque está hasta las pelotas, de los privilegios de algunos.

Salu2

nilien

De como se llevan por delante a alguien que intenta cambiar las cosas, y que apuesta por el diálogo, la pluralidad, y la transparencia:

"Por ejemplo, para mí es importante el tema de la Memoria anual que realizamos en 2013. La idea de explicarles a los ciudadanos cómo hemos trabajado, qué hemos hecho, cómo hemos gastado el dinero, me parece necesaria. En diciembre de 2014 Antonio Hidalgo y yo queríamos dar un salto cualitativo en este sentido. Queríamos convocar una especie de junta abierta a la ciudadanía para explicar el informe anual en una conferencia. Queríamos que la gente supiese, de viva voz, dando la cara, cuál era el resumen del año, los gastos realizados…"

"Creo que nos debemos tomar la cultura muy en serio. En ese sentido, el hecho de que el CENDEAC esté prácticamente parado en este momento me parece muy grave. ¿Qué pasaría si esto ocurriese con un hospital? Yo trabajo en el ámbito cultural y me parece muy serio que por una decisión política que no parece tener motivaciones claras se detenga la actividad de una institución pública. ¿Los agentes culturales de la ciudad pueden aceptar esta situación como si nada? Si respetamos la cultura, lo que está pasando nos tiene que parecer muy grave."

"[..] uno de los mayores esfuerzos que he realizado ha sido vincular el ámbito del arte y de la cultura al resto de la ciudadanía. [...] Si queremos que la cultura sea realmente importante, tenemos que entender cuál es su engarce de fondo con la sociedad. Para mí ese engarce está en la lógica del pensamiento crítico. Un pensamiento que nos permite analizar a fondo nuestras formas de organización social, nuestros valores, nuestras perspectivas sobre la realidad... Por eso estoy, siempre lo he dicho, en contra de la asunción de la cultura como Industria Cultural. Eso la convierte en un elemento de consumo, más o menos erudito, pero de consumo al fin y al cabo."

nilien

#2 De "cómo", :P, se me fue la tilde...

D

Le nombraron a dedo y a dedo cae