Hace 9 años | Por Luzbel a yorokobu.es
Publicado hace 9 años por Luzbel a yorokobu.es

El ser humano siempre ha querido, porque ha necesitado, cartografiar el mundo. Porque nos aterra la incertidumbre. Porque necesitamos conocer la realidad para respirar en ella. Así, desde la aparición del pergamino, y aún más del papel, la descripción válida de cualquier territorio, de incluso de cualquier espacio, se ha venido realizando mediante documentaciones bidimensionales. Planos arquitectónicos, planes urbanísticos, representaciones forestales o costeras, redes de carreteras, cartas de navegación. En definitiva: mapas.