Un estrato del yacimiento arqueológico de Tell Timai (la antigua Thmuis), situado 102 kilómetros al norte de El Cairo muestra numerosas pruebas de destrucción que datan de principios del siglo II a.C. La quema, el rápido abandono de objetos en una casa, la destrucción de un complejo de hornos, armamento y cuerpos insepultos esparcidos por una amplia zona del norte de Tell Timai indican que la ciudad de Thmuis fue objeto de un episodio bélico.
Polibio es bastante escueto al narrar lo sucedido con los caudillos de la revuelta, pero está bien escrito:
Cuando Ptolomeo rey de Egipto asedió la ciudad de Licópolis, los aterrados jefes egipcios se rindieron sin condiciones. Los trató mal e incurrió en gran peligro. Más o menos lo mismo ocurrió cuando Polícrates se apoderó de los rebeldes. Athinis, Pausiras, Chesufus, e Irobastus, los jefes supervivientes, se encomendaron a la buena fe del rey. Empero, Ptolomeo, quebrantando su palabra, ató a esos hombres a carros y, tras arrastrarlos por las calles y torturarlos, les dio muerte.
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Polibio es bastante escueto al narrar lo sucedido con los caudillos de la revuelta, pero está bien escrito:
Cuando Ptolomeo rey de Egipto asedió la ciudad de Licópolis, los aterrados jefes egipcios se rindieron sin condiciones. Los trató mal e incurrió en gran peligro. Más o menos lo mismo ocurrió cuando Polícrates se apoderó de los rebeldes. Athinis, Pausiras, Chesufus, e Irobastus, los jefes supervivientes, se encomendaron a la buena fe del rey. Empero, Ptolomeo, quebrantando su palabra, ató a esos hombres a carros y, tras arrastrarlos por las calles y torturarlos, les dio muerte.
Ni dios, ni amo, ni faraón.
! Qué bonita es la historia de la "humanidad" ¡
Siempre de guerra y destruyendo.