Como todos los veranos, se sucede en nuestro territorio nacional la plaga de incendios forestales que acapara portadas de diarios y bloques de información de los diferentes medios de comunicación. Como todos los veranos también, se acumulan en estos medios las ligeras y poco documentadas opiniones de periodistas sobre las causas del fuego y sus posibles soluciones. En esta entrada del blog os vamos a dar nuestra opinión sobre los incendios forestales, sus causas, sus posibles soluciones y qué hacer en un terreno después del paso del fuego.
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Medios y politicos, porque todos los años van a endurecerlo pero como en su mayoría son ganaderos, multita y al año que viene vuelta a rasgarse las vestiduras para luego no hacer nada...
Lo cierto es que el fuego lleva moldeando nuestro paisaje desde hace milenios, desde que a los primeros agricultores y ganaderos se les ocurrió prender fuego a parcelas de bosque primario para abrir pastizales y tener tierras cultivables. Hace 100 años había incendios forestales, y como ahora eran causados por rayos, por imprudencias, por accidentes e incluso por intenciones pirómanas; pero al estar nuestros bosques mucho más explotados y segmentados por la presencia de cultivos y zonas de pastoreo, los propios vecinos tenían capacidad de pararlos (muchas veces haciendo contrafuegos) para que su alcance no fuera más allá de un puñado de hectáreas.
Desde que en los 60's se empezó a despoblar el campo, se abandonaron cultivos y se dejaron de explotar los bosques, los arbustos, matorrales, árboles jóvenes y plantas de poca entidad empezaron a proliferar, junto con especies de árboles pirófitas que arden con mucha más facilidad, hace falta muy poco para que una chispa se convierta en un incendio pantagruélico. Y si bien es cierto que, por una parte, gracias a la mejor preparación de los cuerpos de bomberos y forestales y la mayor concienciación de los ciudadanos no sufrimos oleadas de incendios de las dimensiones de los 80's y 90's; toda esa energía de biomasa acumulada sigue ahí, y los veranos cada vez más cálidos y secos que iremos padeciendo pueden volver a desencadenar incendios catastróficos, agravados por la proliferación de urbanizaciones y segundas residencias a pie de bosque.
Quizás la solución sea volver al conocimiento de nuestros ancestros y combatir el fuego con fuego, hacer pequeños incendios controlados que quemen el sotobosque cuando las condiciones lo permitan, que consoliden los árboles adultos y alejen el potencial combustible de las copas, para así dificultar el avance de los incendios incontrolados en verano.
Infografía sobre incendios forestales en España
El bosque protector - Incendios forestales