Para Alejandra, 43 años, todo comenzó con un accidente que su marido Nacho, también 43, sufrió haciendo snowboard. Sucedió en el año 2000. No había demasiada esperanza: se iba a pasar el resto de su vida en una silla de ruedas, con nula movilidad de la cintura para abajo. Años después, ambos estaban en el hospital de parapléjicos de Toledo cuando, en una de aquellas interminables jornadas de tratamiento y de cuidados intensivos, alguien les dijo que una famosa doctora daría allí una conferencia, y que les podía interesar.
Comentarios
Estaba claro que mentía más que Judas si se hacía llamar Ramón y era una doctora.
#3 No está tan claro... recuerda la canción de Los Burros (pre-último de la fila): Mi novia se llamaba Ramón.
Ya pasó tambien con el saolí... la prensa tacha de " FALSA /o " al que le da la gana.
Esta es una doctora como una catedral y el saolì un monje del Tibet.
FALSO es lo que prometían.
Creo que, después de lo visto, la investigación en la que hizo "andar a las ratas" debería ser revisada...
Este parece ser el paper: Functional recovery of paraplegic rats and motor axon regeneration in their spinal cords by olfactory ensheathing glia.
https://www.cell.com/neuron/fulltext/S0896-6273(00)80905-8?_returnURL=https%3A%2F%2Flinkinghub.elsevier.com%2Fretrieve%2Fpii%2FS0896627300809058%3Fshowall%3Dtrue
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