La última fiesta que nos queda de este inicio de año son los #ReyesMagos. Esta celebración puede ser interpretada como un gran #potlatch, así que venga, vamos con una pequeña explicación.
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Comentarios
#5 ponen la cara que ponen los míos, supongo.
Aunque ajedrez ya tienen, sobre todo reciben libros, juegos de construcción, efectivamente puzzles y kits de manualidades.
Claro. Si les han machacado con anuncios...
#5 ¿Eso es menos capitalista?
Para mí es una adoctrinación del capitalismo para niños, tipo catequesis, disfrazada de "tradición" religiosa en cuanto a ofrenda/regalo, de modo que todo el mundo está contento y hay movimiento económico, Baltasar no es negro sino pintado, y se habla de cosas que distraen la atención "popular".
#1 Los Reyes Magos solo se celebran en España y algunos lugares de Latinoamérica, muy "capitalista" no creo que sea.
#2 Entonces, ¿cómo es que los niños se saben todo lo que quieren que les regalen/compren? ¿Se les ha instruido antes quizá? ¿Anuncios, pantallas etc no tienen nada que ver? Regálales unos "juegos reunidos", un ajedrez o un puzzle a ver qué cara te ponen.
#1 El artículo dice que es una forma de potlach. El potlach es un sistema económico de capitalismo inverso, donde los "grandes hombres" no buscan acumular riquezas si no que compiten por ser el que más riqueza redistribuye. Era un sistema económico de algunos indios de Norte América. Los gobiernos de EE. UU. y Canadá se apresuraron a prohibirlo por ser "costumbre salvaje"
"Un potlatch es una ceremonia cuyo objetivo es donar o destruir más riqueza que el rival, demostrando que se dispone de más bienes que nadie [...] y en la que una pluralidad de competidores similares...
2.- en categoría pueden exigir ser considerados dignos de estatus y admiración (capital simbólico) y, por tanto, de capacidad de mando. La idea es que el dispendio generado muestra, por un lado, que no te importa la riqueza, mientras que...
3.-, por otro, supone una redistribución de la riqueza entre el resto de la comunidad y una forma de nivelación social"
Lo de destruir riqueza fue en la etapa final, Los "grandes hombres" competían entre si por la mano de obra pagando más. Con la llegada de los blancos la población cayo y ante la escasez de trabajadores que recibieran sus regalos, los grandes hombres comenzaron a destruir sus riquezas.
Pero disiento. Regalar a los propios hijos no es un potlach.
Hay potlatch, hay meneo.
En el siguiente capítulo: explicación antropológica del terraplanismo.
Es un sucio truco ladino para acreditar "la Monarquía" en la mente de los niños, desde la más tierna infancia.