El encuentro tuvo lugar en el paraíso para el esquí de Val Palot (Italia). Un guardia forestal recorría una pista con los esquís de fondo cuando se le acercó un urogallo; animal difícil de encontrar y muy territorial.
|
etiquetas: brescia , italia , urogallo , val palot , encuentro
www.youtube.com/watch?v=yWO0ACvIArI
El instinto de pegarle un tiro a todo bicho raro que se vea algunos lo tienen. Como el patán ese que se vanagloriaba hace unos años de haber matado un zorro blanco. Un zorro no se come.
Y con esto no me malinterpretes, que irse al monte a pasar el día y volver con una bolsa de castañas o un conejo para comer, me parece estupendo. Pero de este tipo de cazador-excursionista cada vez quedan menos. Epecie en extinción también.
Ha sido desplazado por el cazador-deportivo "a ver quién mata más". Y sí es de cazurros que el primer instinto ante cualquier bicho que se te cruce sea el de pegarle un tiro.
Por cierto, no cazo ni creo que lo haga, pero lo entiendo
Sí, más o menos opino lo mismo.
La caza de comer, ningún problema. La caza de excursión (traerse una pieza, o dos tras pasarse el día disfrutando del monte), a favor.
Pero la caza de limpiar el monte de bichos en contra.
Dejando aparte la caza como necesidad, hay dos actitudes en esto:
El cazador-excursionista, que va a observar, disfrutar, y no sólo matar algo. Aprecia algo que no es suyo, se siente invitado y es respetuoso y disfruta de todos los aspectos de la naturaleza, no sólo de… » ver todo el comentario
Un vecino que por entonces estaba recuperando una finca a la que el monte había ganado, cuando supo del bicho, su primer comentario es "pues hay que cazarlo… » ver todo el comentario
Pero empezó a haber carreteras decentes, escopetas y munición relativamente asequibles, y junto a más factores, se cargaron parte de la fauna más delicada.
Siendo muy niño me acuerdo que me contaban que en los pueblos del norte de Castilla no tiraban a las codornices, ni a las perdices siquiera, que tenían poca carne para gastar cartuchos. Liebre y conejo sí. Y las avutardas eran como matar un mamut.
Es una pena como de la comida de subsistencia se ha ido pasando poco a poco a la caza como "deporte". Se le ha pegado un manoseo a los montes que algunos cuesta reconocerlos.
La que más recuerdo era un invierno, y había nevado algo, y helado mucho. Estaban relativamente cerca de la carretera, y paré el vehículo para disfrutar del espectáculo.
Además para mí es una especie de animal mítico, pues mi padre era cazador, y mató un par de ellas justo antes de que se prohibiera su caza. Hizo unas fotos (tengo que buscarlas), y de niño me fascinaba ver cómo podía haber un ave tan grande.
Tal vez aprendas algo.
La carne no crece en la hierba
blogs.20minutos.es/cronicaverde/2008/05/21/el-urogallo-mansaan-baja-li