Hace 9 años | Por Matroski a irreductible.naukas.com
Publicado hace 9 años por Matroski a irreductible.naukas.com

9 de marzo de 1929. Isidore Fink era un joven dueño de una discreta lavandería en Nueva York. Trabajaba, y también vivía, en una pequeña habitación-sótano del este de la ciudad. Aquella noche se encontraba trabajando en su habitación. Temeroso de los ladrones, Fink había cerrado la puerta y las ventanas por dentro. A eso de las 22:30 una vecina escuchó ruidos de forcejeo (no de disparos) y avisó a la policía. Cuando acudieron se encontraron que la habitación estaba cerrada desde el interior. Las ventanas también, y aunque las rompieron...

Comentarios

asensio

Fue el mayordomo con una barra de pan duro.