Recuerde el alma dormida, avive el seso e despierte contemplando cómo se passa la vida, cómo se viene la muerte tan callando; cuán presto se va el plazer, cómo después de acordado da dolor, cómo, a nuestro parecer, cualquiera tiempo pasado fue mejor.
Comentarios
Yo llevo sangre de Jorge Manrique en mis venas, aunque después de tantos siglos poca queda.
#0, me acabas de retrotraer a 1º de bachillerato. No sé si agradecértelo o no, porque a mi edad estos sobresaltos pasan factura.
Difícil superar esto: