Hace 9 años | Por Silent8 a lasangredelleonverde.com
Publicado hace 9 años por Silent8 a lasangredelleonverde.com

Muchas sociedades, y desde luego la nuestra, construyen centros o delimitan lugares en donde los “otros” son apartados y segregados. Leprosos hace siglos, locos no hace mucho y ancianos hoy. Algunos consideran que se ha producido un progreso porque ya no se exilia a los “no válidos” en cuevas hediondas o sórdidos manicomios, “Arrugas”, efectivamente, habla de un internamiento más limpio y sanitario pero es la limpidez, precisamente, la que dota a esa segregación social de un cariz más hipócrita. Hasta hace poco el anciano, la abuela…

Comentarios

Nitros

Hasta hace poco el anciano, la abuela… no eran un estorbo sino elementos que enriquecían la vida familiar; el respeto a los mayores ha sido un valor fundamental para muchas culturas.
Hasta hace poco, la mujer se quedaba en casa barriendo, fregando, cocinando y cuidando de sus padres/suegros. Afortunadamente, hemos evolucionado hacia una sociedad donde las mujeres ni quieren ni pueden verse relegadas a esas tareas en exclusividad.

¿Que propone el autor? ¿Volver a la cultura de que uno de los conyuges se quede en casa cuidando de la gente mayor? Porque a la cultura de vivir con los padres ya estamos volviendo a pasos forzosos.