Corría el año 46 a.C. y por aquel entonces en Roma gobernaba un tipo llamado Cayo Julio César (hijo). Alguien más bien raro y empecinado en acumular para el imperio todo el poder posible. Y ya si eso un poquito también para él, que se lo había currado durante muchos años. Y no es fácil dirigir un imperio cuando una parte de la cámara que te ha elegido quiere matarte. Porque la política por aquél entonces no era como ahora. En aquél momento, además de los scratches, los velados insultos en el senado, y alguna que otra obra teatral que se...
Comentarios
¿Annus confusionis no es cuando te equivocas de agujero?
#1
-Sabes cuando te equívocas y metes el pen drive por el puerto HDMI y entra igual?
-Paco, he dicho que por el culo NO!
#4 - Por el culo no, Paco, que sabes que no me gusta.
- Pues entonces ya me dirás, Manolo.
Bastante poco rigor histórico, por no hablar del estilo "guay" de redacción. Entre otras cosas, Julio César no fue quien decidió llamar Iulius a Quintilis.
#2 Bueno, pues ilumínanos, que esto también forma parte de menéame
#3 Fue Marco Antonio, en honor y reverencia a Julio César, quien propuso tal denominación para agasajarlo. Se sabe por cartas de Cicerón que tal denominación entró en vigor aún en vida de Julio César.
Que todavía haya gente que escriba cosas así y que nadie le ponga de patitas en la calle tiene delito...
El calendario romano era preminentemente lunar, basado en ciclos lunares y era un verdadero caos. Hacia la época de Cayo Julio el calendario decía que era invierno cuando estaban a poco de llegar el verano. Tras volver de perseguir a Cneo (Pompeyo) por Egipto y resolver el problema dinástico que alli había, César decidió adoptar el calendario egipcio, basado en el sol. Mucho más exacto y que resolvía en parte el desfase. Por cierto, como bien ha dicho #5 no fue el propio Julio el que cambió el nombre a quintilis, en cambio sí fue Turino (el futuro Augusto) el que cambió el nombre a sextilis (Agosto) y le añadió un día mas para no ser menos que Julio