Hace 10 meses | Por blodhemn a abc.es
Publicado hace 10 meses por blodhemn a abc.es

La España previa a la invasión napoleónica no estaba lejos tecnológica y económicamente de Inglaterra o Francia, y superaba en muchos campos a otras potencias como Prusia, Austria y Rusia. Lista de 32 científicos e inventores españoles desde el siglo XV hasta el XX que han sido injustamente olvidados.

Comentarios

M

No me parece que Servet sea un desconocido. En la línea de abc, el primero es un valenciano ayudado por el rey de Aragón, o sea que España no existía. El segundo italiano. No sé, a mi el titular me parece erróneo

P

#3 poner el ejemplo de Servet para decir que en el XVI España como nación no existia refleja como mínimo desconocimiento . Te aconsejo leer 'Estado moderno y mentalidad social" de Maravall antes de soltar tan atrevidas afirmaciones

falcoblau

Curioso que en ABC no duden en acordarse del submarino del militar Peral, pero en cambió no recuerden el submarino del catalán Monturiol (el primer submarino a motor) a pesar de ser más antiguo.... cosas de de los medios estatales a la hora de reescribir la historia de España.

m

Votaría positivo si no fuese por el espiritu de revisionismo histórico de la introducción.

d

Hubo grandes hombres de ciencia en la Edad Moderna, pero la mayoría se dedicaba a temas militares, lo que les proporcionaba tiempo y medios para sus inquietudes. En realidad hicieron más avanzar el arte de la guerra que otra cosa.

Los más recientes del siglo XX, además, acabaron la mayoría exiliados, con la terrible pérdida humana para el país. Sonadísima es la ausencia de Federico Molero, que acabó en la URSS inventado la energía termosolar.

themarquesito

Echo en falta a Agustín Farfán, que encontró y publicó que los cítricos prevenían y curaban el escorbuto 200 años antes de que Lind hiciese lo propio. Cito al ilustre Farfán:

Y el mejor y mas prouechoso para esta enfermedad, y para el tabardete, y calentura ardiente, es el agro de limones. Hazense estos xaraues desta manera. Tomen cinco partes de qualquiera çumo, y quatro partes de açucar, y cueza todo a fuego manso, hasta que espume bien, y quede en punto de lamedor