De repente, entre los disparos empezó a sonar un grito por la radio. “¡Real!, ¡real, ¡real!, ¡Alto el fuego!”. La cosa se había tornado seria. Fue en el campo de maniobras Chinchilla (en Albacete). Desde hacía unos días, varios soldados de la Legión estaban realizando un ejercicio de fuego real, pero hubo que detener todo porque una bala había alcanzado al legionario Joaquín Hipólito.
Comentarios
La cabra, único ser vivo cuerdo de la legión.
Pobrecito, cómo le han dejado la cara. Espero que alguien pague por esto.
Noticia irrelevante, que no aporta nada nuevo al caso ni aclara nada ni se por que se ha publicado...
Llamadme raro.
Igual que le pasó al legionario Cruz, un mando le ha disparado.