Si la perfumería bebe de las flores y la agricultura sufre los efectos del cambio climático, ¿está nuestro perfume favorito en peligro? La industria ya piensa en esas cuestiones e innova para afrontarlas.
La perfumería no bebe de las flores, ni de los árboles, bebe
de la industria del petróleo y sus derivados.
Ya no dependen del esperma de ballena (ámbar gris) ni de las glándulas del culo del castor, solo y exclusivamente de los derivados oxigenados, nitrogenados y sulfurosos del los hidrocarburos obtenidos del petróleo.
Dejensé de pamplinas y de greenwashing.
Comentarios
Que trabajen en alguno que disimule el olor a pez en descomposición.
Subiendo precios, seguro.
Vendo colonía de Bustamante, intacta en su caja, me la regaló mi suegra hace 10 años.
La perfumería no bebe de las flores, ni de los árboles, bebe
de la industria del petróleo y sus derivados.
Ya no dependen del esperma de ballena (ámbar gris) ni de las glándulas del culo del castor, solo y exclusivamente de los derivados oxigenados, nitrogenados y sulfurosos del los hidrocarburos obtenidos del petróleo.
Dejensé de pamplinas y de greenwashing.