"Con los 192 muertos del atentado yihadista del 11M contra los trenes de Madrid tampoco se anduvieron con muchos miramientos. Pilar Manjón, madre de uno de los fallecidos, asegura que se cruzó tiempo después con Francisco Álvarez Cascos, exministro de Aznar, y le escuchó decir: "Por esa puta y cuatro muertos perdimos las elecciones". Y es que, tres días después de la matanza, se votaban las generales, y el Gobierno del PP intentó, con burdas mentiras, convencer al pueblo español de que había sido ETA."