Los terremotos son uno de los fenómenos naturales más complejos y destructivos que tenemos en el planeta. Los hemos visto provocar incendios, arrasar ciudades y producir Tsunamis, pero aun así no hemos logrado descubrir métodos de detección que nos avisen con antelación de su llegada y nos permitan hacer un plan de evacuación que salve vidas. Los científicos creen que la situación va a peor y que su incidencia irá en aumento en las próximas décadas debido al deshielo y el aumento del nivel del mar.