La dieta impacta en el cerebro mucho más de lo que pensamos. Un nuevo estudio de investigadores de la UNC School of Medicine de Carolina del Norte (Estados Unidos), publicado en Neuron, revela cómo la comida chatarra puede reconfigurar el centro de la memoria del cerebro, aumentando el riesgo de disfunción cognitiva. "Sabíamos que la dieta y el metabolismo podían afectar la salud cerebral, pero no esperábamos encontrar un grupo tan específico y vulnerable de células cerebrales que se vieran directamente afectadas por la exposición a corto plazo