Hasta que los políticos, no esten obligados en cumplir sus promesas y programas electorales por ley, no me creo nada de ninguno. Ya me han engañado bastante. Lo siento, pero mi confianza en ellos está por debajo de los suelos.
A ver si nos damos cuenta de que el país está arruinado. La propia Aguirre lo ha dicho.
Nos esperan años muy duros, aunque no queramos asumirlo. Ojalá me equivoque.