Intenté leer "Mi lucha", lo logré sólo con las primeras páginas sin aburrirme, luego lo dejé. Me aburren sus aseveraciones, de hecho, estaba buscando alguna fuerte sobre los judíos pero lo dejé por aburrimiento como ya he dicho.
Los argumentos de Hitler no son risibles. Eso tio era inteligente. Lo que dice es: Yo soy un don nadie, pero quiero conquistar el poder. Me invento una estratégia que veo factible. Esa estratégia necesita un enemigo. Procedo a la identificación de enemigos potenciales. Observo que los judios están solos y no los defenderá nadie. Los selecciono.
Cítalas todas: Tokyo, Nueva York, Los Ángeles, Buenos Aires, Bombay, Shanghai, Pekín, Ciudad de México, Delhi, Calcuta, Sao Paulo, Rio de Janeiro, París, Londres, Berlín, Moscú, El Cairo, Lagos, Teherán, Karachi, Jakarta, Singapur, Manila y Seúl entre otras pocas mas, son macrociudades habitadas por microciudadanos, que precisarán de nanoapartamentos.
No sé que me gusta menos, el no tener armarios, ese suelo imposible de barrer o tener que dormir en un mueble picudo idéntico a otro donde tengo que comer.
Lo de reutilizar el espacio ya lo han inventado en Japón y se llaman "futones". Esto de aquí parece pensado más bien para ciborgs que para personas.
Imaginad por un momento que la infanta va a la cárcel. Imaginad el careto del funcionario que tenga que cachear a Juan Carlos I de Borbón, el día que vaya a visitarla.