Tengo que reconocer que estoy algo saturado de toda la carga que empieza a llevar aparejada el concepto de turismo sostenible. Que nadie me vaya a malinterpretar… digamos que estoy hasta el moño de su uso, que no de su fondo. Como forma de viaje, como filosofía de vida, me siento plenamente identificado con esta manera de entender el sector turístico. Sueño con el día en que, de verdad, sin tapujos y sin intereses encubiertos, el turismo sea una manera de enriquecimiento personal y colectivo.
Comentarios
Ahora mismo el la ciudad que vivo en Canarias está llegando mucho turismo de bocadillo de tortilla con patatas. Antes solamente venían turistas ricos, sobre todo alemanes jubilados y además con estudios universitarios, pero ahora cada día llega más turismo de botellón y de estudios primarios.
Ahora ves muchos turistas con mochilas haciendo dedo, pues parece que no tienen dinero ni para pagarse el autobús, y los ves por los campos recolectando fruta, un aguacate de aquí, un plátano de allí, una naranja de acá, una manzana de allá, y así van llenando la mochila poco a poco. Hoy me vi a un turista de esos en una plaza de la ciudad vendiendo unos aguacates que tenía en una pequeña caja de cartón.
La mayoría de los nuevos turistas son turistas que parece que están emulando el movimiento hippie sin ser ricos, no saben que los auténticos hippies son pijos de clase media que viajan con la cuenta corriente de sus padres, que van de hippies y al mismo tiempo tienen la tarjeta de crédito para comprar en los LIDL.
Hoy había una pareja de "hippies" de esos haciendo dedo, haciendo gestos muy raros a los coches que pasaban. Fui a comprar al LIDL y cuando regresé esa gente estaba todavía en el mismo lugar haciendo dedo, y es lógico porque con esa pinta y esos gestos no creo que les pare ni sus propios padres.
Ese es el turismo que ahora mismo está llegando a Canarias.
#1 Mientras cuiden de la isla y la mantengan limpia, que hagan lo que quieran.