El camino al más allá es recto y largo, muy largo. Casi tan largo como solitario. Por no haber, no hay ni gasolineras en esta Ruta Estatal 375. La más cercana, a 80 kilómetros. Nadie dijo que llegar a la otra dimensión fuera sencillo. Ni que había que ir en coche. Lo de la levitación y el abandono del cuerpo aquí no es posible. Si uno quiere llegar a Rachel, en pleno desierto de Nevada, tiene que hacerlo en alma, pero también de cuerpo presente, y, a ser posible, conduciendo.
Comentarios
Esta noticia me demuestra que el auténtico Meneamé está en el apartado de "Nuevas"
Aun recuerdo el excelente articulo "Luna roja" de Daniel Marin que no llegó a portada. Y esta tontera si.
¿Visteis ayer la peli de Paul, eh?
Yo soy mas de Bienvenidos al fin del mundo.
Culo... (Portada y 0 comentarios :S)