Recibir un buen trato por parte del servicio cuando uno va a comer a un restaurante es básico para que la experiencia sea agradable y deje una buena sensación a los comensales. De lo contrario, cuando se recibe un mal trato, suele ser un motivo suficiente para que los clientes no vuelvan nunca más.
Recuerdo un restaurante llamado "La Tomaquera" de El Poble Sec (en Barcelona) cuyo propietario era "peculiar"... no era mal educado de por sí, era... a ver, ejemplos:
- Una vez quien reservó la mesa tenía un nombre francés, él llamó a la gente diciendo... "alguien de nombre alemán que no entiendo!" ... como no salía nadie, ella dijo su nombre, él dijo "pues eso!", ella dijo "eso es francés" y el respondió: "es lo mismo!".
- Una vez no quiso traerme el segundo plato sino comía más del primero (me tuvieron que ayudar).
- Movió a los comensales de varias mesas porque los caracoles solo se servían para dos comensales y había dos personas, de mesas distintas, que querían caracoles, así que los sentó en mesas adyacentes y redistribuyó a la gente de las otras mesas.
- (Esto no lo he visto, pero me lo contó una persona fiable) Un cliente se quejó de que las natillas del postre no estaban buenas y el tipo hizo sacar todas las natillas que estaban preparadas y fue de mesa en mesa haciendoselas probar a los clientes y preguntandoles "¿Están buenas?" y claro, los clientes decían que sí... y al final se dirigió al cliente al que no le habían gustado las natillas y le dijo: "Y ahora no pienso cobrarle la comida... pero las natillas están buenas!".
En la puerta había un cartel que decía, "Esta es mi casa ¿verdad que ustéd hace lo que quiere en la suya? Pues aquí se hace lo que yo digo" o algo así.
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Recuerdo un restaurante llamado "La Tomaquera" de El Poble Sec (en Barcelona) cuyo propietario era "peculiar"... no era mal educado de por sí, era... a ver, ejemplos:
- Una vez quien reservó la mesa tenía un nombre francés, él llamó a la gente diciendo... "alguien de nombre alemán que no entiendo!" ... como no salía nadie, ella dijo su nombre, él dijo "pues eso!", ella dijo "eso es francés" y el respondió: "es lo mismo!".
- Una vez no quiso traerme el segundo plato sino comía más del primero (me tuvieron que ayudar).
- Movió a los comensales de varias mesas porque los caracoles solo se servían para dos comensales y había dos personas, de mesas distintas, que querían caracoles, así que los sentó en mesas adyacentes y redistribuyó a la gente de las otras mesas.
- (Esto no lo he visto, pero me lo contó una persona fiable) Un cliente se quejó de que las natillas del postre no estaban buenas y el tipo hizo sacar todas las natillas que estaban preparadas y fue de mesa en mesa haciendoselas probar a los clientes y preguntandoles "¿Están buenas?" y claro, los clientes decían que sí... y al final se dirigió al cliente al que no le habían gustado las natillas y le dijo: "Y ahora no pienso cobrarle la comida... pero las natillas están buenas!".
En la puerta había un cartel que decía, "Esta es mi casa ¿verdad que ustéd hace lo que quiere en la suya? Pues aquí se hace lo que yo digo" o algo así.
Los de Granada son bordes de manera innata y también triunfan.
#1 si, pero porque ponen tapas, no porque sean follesques.
#1 Veo que ya está puesto, me voy
Eso lo inventaron "Los Bestias" en Valencia hace ya décadas.