Hace 3 años | Por albertiño12 a youtube.com
Publicado hace 3 años por albertiño12 a youtube.com

El programa 'Al filo de lo imposible' consiste en una serie de documentales que tiene como temática común la aventura y la exploración de lugares salvajes y de alto riesgo de la Tierra, como la escalada de cimas de más de 8.000 metros, la exploración de los casquetes polares, travesías en vuelo libre, el buceo a grandes profundidades, etc. Esta serie de más de 200 documentales es uno de los "clásicos" de nuestra televisión pública con sus más de 35 años en antena. Es esta recopilación se rescatan del olvido más de 40 de esos documentales.

Comentarios

javierchiclana

#0 Buen aporte... una pena que buena parte esté a una resolución penosa 240p

albertiño12

#4 Es una pena que RTVE todavía no haya digitalizado uno de los programas más míticos de la televisión pública. Luego se ven en su web programas anecdóticos que sí que han sido digitalizados. No tiene ningún sentido.

panera

#5 Siguen teniendo derechos de autor? Imagino que si

Rorschach_

Qué tontada es esta, ¿se rescatan del olvido?...

https://www.rtve.es/alacarta/videos/al-filo-de-lo-imposible/ (255 vídeos)

albertiño12

#1 Estos documentales son de la primera etapa del programa, cuando lo dirigía Sebastián Álvaro, que es la época por la que realmente se recuerda este programa. Esa etapa duró hasta 2008. En la web de RTVE incomprensiblemente faltan la mayoría de los documentales de esa época. Si quieres puedes comprobar los documentales que hay anteriores a 2008.

Rorschach_

#2 Vaya, pues ese detalle debería figurar en algún sitio para poder hacer la distinción.

fofito

#2 gran aporte

t

Y esto amigos era un programa real de "deportes de aventura". Desde Laureano casado en su paramotor, hasta escalada en el Verdón, pasando por el K2. Desde la dirección de Sebastian Álvaro, hasta la música de Suso Saiz, todo era un flipe.
Me hago viejo joder.
Que tome nota el tal Calleja ese lo que es un programa de montaña decente.

casius_clavius

Esta sí que era producción propia y de muy buena calidad. No le faltaba detalle: grandes especialistas, un guión contenido, nada de estridencias, un narrador tranquilo y elegante que se expresaba con un lenguaje formal sin ser cargante, pero sobre todo, las proezas que aparecían de los deportistas y no olvidemos los cámaras, superhombres que acompañaban al deportista a veces en lugares inhóspitos y peligrosos.