Hace 7 años | Por ccguy a jotdown.es
Publicado hace 7 años por ccguy a jotdown.es

Si le preguntas a un aficionado medio por los dos Giros que ganó Miguel Indurain en 1992 y 1993, es poco probable que le venga a la cabeza un recuerdo nítido. Quizá el duelo con Chiappucci del primer año, adelantamiento incluido en la última contrarreloj, quizá Bugno vestido de lo que por entonces se denominaba maglia ciclamino. Aquellos tres años de Indurain en Italia se suelen asociar con dos nombres: Mortirolo y Pantani, en alusión a la famosa etapa con final en Aprica que presentó en sociedad a «il Elefantino» de Cesenatico.