Julia y Cassandra se conocieron en 2013 cuando trabajaban en el mismo restaurante. Al poco de conocerse, descubrieron que ambas llevaban un tatuaje con la bandera de la República Dominicana, el país del que eran originarias. Gracias a este hecho y a su afinidad se hicieron muy buenas amigas. Como se llevaban tan bien y había parecido físico, los compañeros empezaron a bromear acerca de que eran hermanas. Finalmente se hicieron un test de ADN que confirmó que son hermanas de padre y madre. Después descubrieron que tenian siete hermanos más.
Comentarios
Ohhhhhh que boniiiiito y conmovedor.
Menos mal que se hicieron amigas y no amantes.
Y celebraron la bondad de sus padres juntas.
Si además fuesen siamesas ya sería la pera limonera.
#1
La historia que conmovió a Spielberg