En 1998, cuando el antropólogo Germán Piffano investigaba para su tesis de grado, le preguntó a una habitante de la llamada ‘calle del Cartucho’, un temido y paupérrimo sector del centro de Bogotá, qué era lo bueno que tenía esta zona, el mayor expendio de drogas de la ciudad. Sin dejar de fumar bazuco, ella le respondió: “La libertad”. A continuación, Piffano le indagó sobre lo malo del Cartucho, y ella, aspirando el humo dulzón, pensó y le dijo: “Uy, lo malo... es la libertad”. (Vea la galería: El español que salió de la vida de drogas y mise
Comentarios
Digo yo que si se drogo años, serian mas de 2 tiros!
Ha tenido mucha suerte de allí se sale generalmente dentro de una bolsa negra con destino a un cementerio
¿ Lo queeee??