Los miembros del club tenían un pseudónimo, un sistema cifrado para comunicarse -cosa que resultó de una utilidad inesperada al estallar la guerra- y sobre todo un código de honor basado en la amistad, la honradez y la ayuda a los débiles. Ese club se llamó Los Amigos de Spirou (ADS) y ahora da título a esta serie de nueve álbumes que arranca con un primer tomo titulado como la frase que inaugura su código: “Un amigo de Spirou es honrado y recto”.
Comentarios
Nosotros tenemos a Roberto Alcázar y Pedrín
#6 Pobre Pedrín, sufría enanismo
#6 y sus spin-offs
#6 Mejor el Guerrero del Antifaz matando sarracenos a mandobles, al grito de:¡¡¡Santiago y Cierra España!!!
Y el Marsupilami dando puñetazos con la cola a los soldados japoneses en los 7 budas? Y la personalidad atormentada de Zantafio? Llegué a Espiru (así se llamaba al principio en España) gracias a aque maravilloso tebeo que se llamaba Strong (y que trajo también a Lucky Luke cuando fumaba o a Gargamel y los pitufos, casiná) del que tuve la coleccion completa (90 números a ocho
8pesetas) y del que algun traslado (o alguno de mis hermanos) me privó hace decadas, un tesoro.Prefiero el pequeño spirou, pero gracias #0
#2 vi la reseña y me pareció interesante, me pillaré el primer tomo. Yo soy más de Spirou y Fantasio.
#3 Tengo la inmensa suerte de conocer a Emile Bravo (el dibujante). Amigos de infancia. Emile es hijo de emigrantes españoles (de Sueca) y todos los veranos venía a la playa de Cullera con su hermana Sophie y sus padres. Recuerdo que Emile ya de bien pequeño (con 10 o 12 años) hacía unos dibujos increíbles. Emile sigue teniendo un gran amor por España y concretamente por Valencia ... incluso tiene un piso y viene frecuentemente. Me ha emocionado este envío ... MUCHAS GRACIAS.
#10 joder, que suerte. Personalmente los años me han ido alejando de los amigos más afines a mis frikadas, y siempre echo en falta una conversación sobre estos temas. En dos días tengo el cómic.
#2 Gracias por mandar la noticia.
En el Spirou de Emile Bravo que menciona la noticia el autor da su versión de los orígenes de Spirou.
Spirou niño sufre una agresión por parte de un cura en el orfanato. Un crucifijo se desprende de la pared y cae sobre el cura matándolo.
Otro huerfano, René, ayuda a Spirou a salir de debajo del cura cuando los sorprende otro religioso.
El compañero es acusado de asesinar a un hombre de Dios y Spirou es expulsado del orfanato para tapar el escándalo.
Le buscan un trabajo en un hotel, donde será explotado. Viste el traje de botones porque con su sueldo no puede comprar ropa.
Que des bons souvenirs, avec les Pifs aussi