Hace 7 años | Por tnt80 a news.mit.edu
Publicado hace 7 años por tnt80 a news.mit.edu

Hace unos 4,6 mil millones de años, una enorme nube de hidrógeno gaseoso y polvo se derrumbó bajo su propio peso, eventualmente aplanándose en un disco llamado nebulosa solar. La mayor parte de este material interestelar se contrajo en el centro del disco para formar el sol y parte del gas restante y el polvo de la nebulosa solar se condensaron para formar los planetas y el resto de nuestro sistema solar.