Hace 5 años | Por poyeur a danielmarin.naukas.com
Publicado hace 5 años por poyeur a danielmarin.naukas.com

En 2017 el descubrimiento del primer asteroide interestelar 1I/ ʻOumuamua nos enseñó que, de tanto en cuanto, nuestro sistema solar recibe la visita de objetos procedentes de otras estrellas. El protagonista ha recibido el bonito nombre de 2015 BZ509 y es un asteroide situado a 770 millones de kilómetros del Sol, con una órbita inclinada 163º con respecto a la eclíptica y una excentricidad de 0,38, que fue descubierto en noviembre de 2014 desde el observatorio Haleakalā en Hawái. Pero, ¿cómo sabemos que se trata de un asteroide procedente de otro sistema estelar? La primera pista de que 2015 BZ509 es un caso especial es que se trata un asteroide retrógrado que está en una órbita sincronizada con la de Júpiter en una resonancia 1:1. La siguiente clave es que Namouni y Morais han demostrado mediante análisis numéricos que la órbita de BZ509 es muy estable pese a que la mayor parte de las órbitas de asteroides en resonancia con otros planetas son inestables. ¿Cómo podemos saber que BZ509 no viene de la nube de Oort y sí del espacio interestelar? Pues no podemos. Los análisis numéricos de Morais y Namouni, aunque sugerentes, distan de ser concluyentes

Comentarios

Ripio

#2 Cuando necesites un descarte, pídelo a un ADMIN (sin @ ) en la fisgona.
Si no te responden a la primera, paciencia, acaban haciéndolo.

poyeur

#1 cierto...@admin ¿podéis descartarla?