En la mayoría de los casos, las agencias de viajes son el principal canal de venta del billetaje aéreo, llegando al 90% en muchos países, y siempre por encima de la mitad. Hace años que las compañías aéreas intentan reducir estos costes de distribución, apostando por la venta directa y otras fórmulas de mayor control de sus contenidos. Pero un estudio revela que apenas hay una diferencia de 11 céntimos entre el coste de la venta intermediada y la directa.