Hace 1 año | Por --703136-- a 20minutos.es
Publicado hace 1 año por --703136-- a 20minutos.es

Las fuertes subidas de tipos de interés aplicadas por el Banco Central Europeo (BCE) desde julio del año pasado arrastrarán a cientos de miles de hogares a la vulnerabilidad financiera. Así lo refleja el Banco de España en su Informe de Estabilidad Financiera publicado el miércoles. El supervisor bancario calcula que una subida de tipos de interés de 4 puntos —desde julio han subido 3,5— hará que 378.000 familias entren en situaciones de vulnerabilidad financiera.

Comentarios

Gry

¿Sería mejor mantener los tipos bajos como hizo Erdogan?

t

#3 no, hay que subir los tipos, tratar de controlar la inflación y grabar extraordinariamente los beneficios de los que se lucran vergonzosamente de la miseria de los demás sin mover un dedo, sin mejorar su competitividad, sin invertir, sin producir nada tangible, sin proporcionar ningún rédito a la sociedad.

Oedi

Ninguna sorpresa. Es precisamente lo que se buscaba.

R

Europa ens roba

D

¿Es Pacificador General una persona que viene a este mundo a decirle a los demás lo mal que lo van a pasar porque han tenido hijos?

Vaya, pregunto. Que igual te has equivocado de nick.

borteixo

#6 o es un bot repitiéndose o es alguien con serios problemas mentales.

t

¿Y los que ha ganado la banca que?

Bankinter ha presentado hoy beneficios récord.

Que se jodan las familias, bagazos que no han montado un banco para hacerse multimillonarios… pudiendo hacerlo y prefieren la paguitas…

D

Trankis, no dejéis que estas noticias aporófobas os hundan la moral. Si queréis un pensamiento positivo que os levante la moral, lo único que necesitáis recordar en todo momento es que vuestros hijos os agradecerán que les hayáis hecho nacer en este país tanto como vosotros lo estáis agradeciendo a vuestros padres.

En efecto, no os abstengáis de hacer nacer a vuestros hijos en la pobreza o la precariedad, dejaos llevar por la naturaleza y por el capitalismo, que son sabios, pues vuestros hijos, cuando alcancen la mayoría de edad, a su vez también defenderán el derecho de hacer nacer a sus propios hijos en la pobreza o la precariedad, por lo cual ya no podrán culparos a vosotros de haberles hecho a ellos lo mismo.

Además, recordad también que lo que necesita la natalidad (y las pensiones) de este despaís de pobreza, de precariedad, de subdesarrollo, de capitalismo y de monarquía es otro baby boom, motivado en el altruismo y la generosidad progenitores. Vuestros hijos os lo agradecerán tanto como vosotros lo agradecéis a vuestros padres, y vuestros padres a sus padres. Además de que vuestros bolsillos también lo agradecerán, gracias a las pensiones aportadas por vuestres hijes. Que sí, que vendrán crisis, pero quienes vengan detrás que arreen, que para eso os hicieron a vosotros los mismo, altruistamente.

No creáis, pues, a nadie que os diga que hay una guerra intergeneracional.

Y recordad también que cuando hacéis nacer a vuestros propios hijos en la precariedad y en la pobreza, no serán los ricos, el capitalismo y la monarquía los que se estén riendo de vosotros, sino que seréis vosotros los que os estéis riendo de ellos.

Nota al pie: os subo esta noticia como otro ejemplo más del tipo de noticia aporófoba que no deberíamos enviar a Menéame, si nos atenemos a los altos estándares éticos e intelectuales sentados por la gente superética y superlista de Menéame, no a la incualificada definición de la RAE de "aporofobia".

Esta noticia, si nos atenemos a esos altos estándares, debería ser considerada aporófoba, además de obviadora de la dimensión cultural, porque, al implicar indirectamente que la pobreza y la precariedad son cosas malas o negativas, está también indirectamente implicando que los padres que hacen nacer a sus propios hijos en la pobreza o en la precariedad están haciendo daño o perjudicando a esos hijos, lo cual a su vez también implica, indirectamente, que los padres que hacen nacer a sus propios hijos en la pobreza o en la precariedad son malas personas y malos padres, sin inteligencia.

Estas implicaciones, pues, de acuerdo con la gente superética y superlista de Menéame, han de llevarnos a considerar la noticia entera como aporófoba, incluso aunque esos padres fueran ricos, además de ser obviadora de la dimensión cultural, porque, aparte de culpabilizar y estigmatizar a todas esas personas superéticas y superinteligentes que, simplemente, ejercen su legítimo, legal y fundamental derecho humano y progenitor de considerar que la pobreza, la precariedad y el subdesarrollo son circunstancias estupendas en las que hacer nacer, y criar, a sus propios hijos, también resulta que el acto de defenderse los derechos de los niños al bienestar y a no sufrir la pobreza o la precariedad, se considera equivalente al acto de atacarse, criticarse, culpabilizarse y estigmatizarse el derecho de los padres pobres al bienestar de satisfacer sus propios impulsos biológicos reproductores, familiares y sociales personales; al bienestar de esos padres pobres de tener pensiones; al bienestar personal de imaginarse a los ricos cabreados porque dichos padres pobres han hecho nacer a sus propios hijos en la pobreza; y al bienestar de dichos padres pobres de ver a sus hijos disfrutando la pobreza o la precariedad, de acuerdo con sus derechos culturales y progenitores.

Desde esta perspectiva, tener hijos es la manera más clara y evidente en que una persona puede mostrar su aprobación favorable del entorno económico o de las condiciones económicas en que dicha persona hace nacer a esos hijos. (Pues ¿qué persona ética e inteligente haría nacer a sus propios hijos en un determinado entorno o circunstancia económica si considerase que ese entorno o circunstancia económica es horrible?)

Quien es pobre es porque quiere votar capitalismo y monarquía, y quien vota capitalismo y monarquía lo hace porque quiere ser pobre.

Y es que la convivencia en una sociedad civilizada precisamente debe consistir en que sepamos respetarnos los unos a los otros las costumbres, marcos culturales, modas, tendencias, y diversidades ideológicas, de opiniones, de preferencias, de criterios progenitores y de principios éticos de cada cual, aunque pudieran no coincidir con los nuestros.

España, pues, va bien y está bien como está, y la precariedad, la pobreza, el subdesarrollo, el capitalismo y la monarquía son cultura, costumbres, modas, tendencias, derechos, libertades, preferencias, elecciones, votos e hijos de los españoles, y nos los tienen que respetar así como nosotros, los españoles, también respetamos las culturas y costumbres ajenas.