A menudo se ha acusado a China de atraer a los países africanos pobres en su trampa de la deuda al proporcionarles préstamos para proyectos de infraestructura muy necesarios y luego controlarlos cuando no pueden pagar sus deudas. El presidente de Tanzania, John Magufuli, canceló un préstamo chino por valor de $ 10 mil millones firmado por su predecesor Jakaya Kikwete para construir un puerto en el arroyo Mbegani en Bagamoyo por términos y condiciones que, dijo, superaron la lógica.
Comentarios
Qué se lo digan a Argentina.
Pues me vienen dos pensamientos a la cabeza. Que sea un tipo honesto, y lo suicidarán enseguida. Que no lo sea, y cancela porque no ha rascado nada de este acuerdo (pues lo hizo su antecesor en el puesto).
Y muchos en menéame deseando acabar con el nefasto dominio estadounidense para echarse a los brazos de uno aún peor, el chino.
Suelen ser los mismos que se alegran de los nuevos portaaviones chinos (buques de proyección estratégica) cuyo fin principal es extender su capacidad operativa. En cuanto alguno de estos países que han caído en sus garras por necesidad dejen de cumplir con los chinos poco tardarán en verse esos buques tan positivos en sus aguas.
Cuidado con el emérito
"Could only be accepted by a drunken man", dijo Magufuli.