Las medidas llamadas "de regeneración democrática" que Rajoy anunció a los suyos le suenan a propaganda electoral a los grupos de la oposición. La idea de que gobierne el alcalde más votado no es nueva, pero llama la atención que el Gobierno la recupere de su programa electoral tras el batacazo de las europeas. Los socialistas exigen que, en todo caso, las medidas se debatan en el Congreso.
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