Hace 14 días | Por Verdaderofalso a infovaticana.com
Publicado hace 14 días por Verdaderofalso a infovaticana.com

El Estado como “empresario indirecto” tiene que cumplir un papel y parte de los impuestos deben volver a los particulares a través de caminos, ferrocarriles, puertos, energía, hospitales, escuelas, seguridad, justicia. Aplicar el principio de acción subsidiaria. Hace tiempo que, en este campo, el Estado está ausente y por muchas cosas se debe pagar aparte, o sea dos veces, lo cual los pobres no pueden hacerlo.

Comentarios

B

No sé. A mí lo que me parece es que esta noticia, al implicar indirectamente que la pobreza y la precariedad son cosas malas o negativas, es estigmatizadora y ofensiva hacia todas esas personas, éticas e inteligentes, que, en ejercicio de sus legítimos derechos, consideran que la pobreza y la precariedad son circunstancias estupendas, tan estupendas como para incluso defender como un derecho el poder hacer nacer, y criar, a sus propias proles en ellas, a que sus proles también les agradezcan, en forma de pensiones, esa pobreza, esa precariedad, ese subdesarrollo y ese capitalismo tanto como esas personas progenitoras los agradecen a sus padres, en la misma forma de pensiones.

Desde esta perspectiva, tener hijos es la manera más clara y evidente (más incluso que meter una papeleta en una urna) en que una persona puede mostrar su aprobación favorable del entorno económico o de las condiciones económicas en que dicha persona hace nacer a esos hijos. Pues ¿qué persona ética e inteligente haría nacer a sus propios hijos en un determinado entorno o circunstancia económica si considerase que ese entorno o circunstancia económica es horrible? Las proles, pues, son las papeletas electorales más rotundas, y por tanto las que más ambiciona el capitalismo, capitalismo que no existe gracias a los capitalistas, sino gracias a los proletarios.

El que es pobre es porque quiere votar capitalismo y pobreza, con sus votos y con su prole. Si los proletarios argentinos quieren arreglar la economía con más niños y con más proletarios en vez de con menos capitalismo, están en su derecho, en su costumbre y en su cultura, y se los tenemos que respetar.

La Argentina, pues, va bien y está bien como está, y la precariedad, la pobreza, el subdesarrollo y el capitalismo son cultura, costumbres, modas, tendencias, derechos, libertades, preferencias, elecciones, votos e hijos de los proletarios argentinos, y se los tienen que respetar así como ellos, los proletarios argentinos, también respetan las costumbres y culturas ajenas.

Y es que el libro de los gustos está en blanco, y la convivencia en una sociedad civilizada debe consistir en que sepamos respetarnos los unos a los otros las costumbres, culturas, derechos, preferencias económicas, criterios progenitores y principios éticos de cada cual, aunque puedan ser muy diferentes a los nuestros.

Así que no permitáis que estas noticias aporófobas desvíen vuestra atención y vuestra ética: no renunciéis a pegaros el gustazo de generar otro baby boom para hacer nacer a vuestras proles en la pobreza o la precariedad, y entregarlas al capitalismo. Porque la natalidad y las pensiones lo necesitan, y porque aunque en un primer momento quizá podría pareceros mal hacer nacer a vuestras propias proles en la pobreza o en la precariedad, cuando vuestras proles alcancen la mayoría de edad también se volverán defensoras del derecho de hacer nacer a sus propias proles en la pobreza, en la precariedad y en el capitalismo, a que estos hijos suyos (vuestros nietos) les agradezcan todas estas cosas, en forma de pensiones, tanto como vuestras proles os las agradecerán a vosotros, en forma de pensiones, y tanto como vosotros las agradecéis a vuestros padres, en la misma forma. Así que no hay ningún problema con que hagáis nacer a vuestras proles en la pobreza, en la precariedad, en el subdesarrollo y en el capitalismo, porque vuestras proles os lo agradecerán, en forma de pensiones.

No creáis, pues, a nadie que os diga que hay una guerra intergeneracional.

Y recordad que cuando hacéis nacer a vuestras propias proles en la pobreza y la precariedad, no serán los ricos y el capitalismo los que se estén riendo de vosotros, sino que seréis vosotros los que os estaréis riendo de ellos.

c

Los dos últimos párrafos -antes de la fecha y firma- no tienen desperdicio

T

Espero que Argentina mejore.. estaremos por el camino correcto? cry