¿De qué manera puedes combatir la obsolescencia programada, luchar contra la contaminación y, al mismo tiempo, favorecer el comercio local y generar puestos de trabajo? El actual Ministerio de Hacienda sueco lo tiene claro: promoviendo exenciones fiscales a la reparación de todo tipo de productos, desde las ropas hasta las lavadoras, pasando por las bicicletas o las neveras. El IVA de dichos servicios será reducido desde el 25% hasta el 12% y se podrá reclamar el IRPF en el caso de los electrodomésticos.
Comentarios
Buen negocio, ahora esperemos que las marcas no les metan el litigios...
Eso aquí no prosperaría, nada de ir en contra de las multinacionales, nada de fomentar las pymes, en este caso de reparaciones, y de descontar impuestos ni hablar. Si nos cobran por el sol....del resto ni agua.