Hace ya más de cien años, el médico, microbiólogo y ganador del Premio Nobel Robert Koch advirtió: “Un día la humanidad tendrá que luchar contra el ruido tan ferozmente como contra el cólera y la peste”. Quizás ese momento ha llegado, ya que hoy en día el ruido ambiental se considera el segundo factor de riesgo ambiental para la salud, solamente por detrás de la contaminación atmosférica. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que 22 millones de personas sufren de molestia crónica al ruido en la Unión Europea.
Comentarios
Desde niño he vivido en el centro de mi ciudad, pero hace un par de años me movi a un barrio más residencial cerca de la periferia.
La diferencia de ruido es abismal, y no me di cuenta de lo estúpidamente ruidoso que era el centro hasta que cambie de zona para vivir.
Ya no hay más gente hablando a gritos, furgonetas en doble fila con el motor encendido, coches pitando, perros ladrando constantemente, cargas y descargas, ambulancias y policia cada poco, borrachos todos los fines de semana, peleas, rupturas de parejas, contenedores volcados por las noches, y un largo etc...
En cambio ahora camino por la calle y hay gente pero no oigo gritos, ni oigo follones de ningún tipo, es otro mundo.
No es que no me enterase de que había ruido, obviamente, es que no era consciente de la gran diferencia en el día a día.
#1 De acuerdo en todo menos lo de los perrors. Yo tambien vivo en un pueblo residencial y cada casa con su perro ladrando a todas horas. Y cada año va a mas. Además ahora se está poniendo de moda el pasarse sabados y/o domingos de fiesta todo el dia con la musica a todo trapo (especialmente por parte de nuevos residentes que vienen al pueblo como si esto fuese Beberly Hills).
#3 Biberli Jilis.
Sonidos agudos como: mover una cucharilla para mezclar el colacao, el canto de un pájaro, etc... Aunque crean que no, me molesta una cosa mala.