Dueños, encargados y camareros de distintos restaurantes y cafeterías de la capital aseguran que es primordial que el trabajador llegue con ganas de aprender e iniciativa.
#7 ya no lo puedo editar, pero claro que puedo añadirlos aunque estos son más específicos:
9. Nunca tendrás ni idea de nada, aunque lleves casi veinte años currando de cara al público.
10. Tus descansos mientras curras siempre serán cortos para ti (que lo son) e interminables para tu jefe.
Y uno extra, cosecha propia:
11. Si es un tascorro de barrio, tu jefe te dirá que no tiene un duro para pagarte más de los 800 que cobras (casi todo en negro) mientras, por ejemplo, le fía al cocas del vecino de arriba cuentas de 200 euros, le deja 30 pavitos "para hacer un recado", o descorcha botellas de vino de 100 euros para bebérsela con los amigotes mientras tu corres de punta a punta del bar asfixiado sin dar abasto.
1. Vas a echar más horas que el reloj de la catedral
2. Te van a pagar una mierda y encima tienes que dar las gracias.
3. Tu jefe SIEMPRE le va a dar la razón al cliente, probablemente humillándote delante de ellos.
4. Tu jefe SIEMPRE va a tener las cartas marcadas a su favor.
5. Tu contrato jamás reflejará las horas que echas y que cotizar debe ser un vodka ruso.
6. Muchos clientes tienen la misma mala educación que aparentan: ninguna.
7. Cuenta con que no vas a coincidir nunca con tu familia ni amigos, y de ser así estarás totalmente "descolgado" de sus vidas.
8. Y si ves que todo se enturbia, pon el móvil a grabar audio desde que entres hasta que salgas. Es por tu seguridad.
PD: No sé si se nota pero tengo unas ganas de que sea ya el juicio con ese cabronazo...
Aseguran que es primordial que el trabajador llegue con ganas de aprender e iniciativa. que ellos ya se encargaran de quitarselas desde el primer minuto. Tanta tontería por no pagar lo que tienen que pagar.
Regla n° 1: No dejes la botella de Terry en una partida de dominó, porque se volatiliza...
Regla n° 2: No dejes que cojan mucha confianza tus clientes, que les das la mano y te acaban estrangulando...
Para ser un buen camarero de élite en España lo que hace falta saber es sumar, restar, multiplicar, dividir e inglés chapucero a nivel B1.
España es un país que exporta universitarios cualificados e importa gente sin cualificación y a medio civilizar para que trabaje en el sector servicios en jornadas de doce horas, o más, por un plato de lentejas, o menos.
Un camarero con ganas de aprender será un camarero becario, supongo, o sea, como las palomas que tendrán que alimentarse de las migajas que se le caen al suelo a los turistas.
#1 un camarero con ganas de aprender es que trabaja de camarero para sacarse unas perrillas mientras termina sus estudios; y se termina pirando del país
#1 El manual del buen camarero dice que para ser un buen camarero es primordial que el trabajador llegue con ganas de aprender e iniciativa.
Pero el manual de la buena empresa de hostelería todavía no lo han escrito, y este manual debería decir que para ser una buena empresa de hostelería es primordial que la empresa tenga ganas de pagar lo debido.
Cada uno tiene que ser bueno en su terreno. No solo unos sí, pero otros no.
Así, los buenos camareros y las buenas empresas de hostelería se encuentran y se unen los unos a los otros.
Comentarios
#7 ya no lo puedo editar, pero claro que puedo añadirlos aunque estos son más específicos:
9. Nunca tendrás ni idea de nada, aunque lleves casi veinte años currando de cara al público.
10. Tus descansos mientras curras siempre serán cortos para ti (que lo son) e interminables para tu jefe.
Y uno extra, cosecha propia:
11. Si es un tascorro de barrio, tu jefe te dirá que no tiene un duro para pagarte más de los 800 que cobras (casi todo en negro) mientras, por ejemplo, le fía al cocas del vecino de arriba cuentas de 200 euros, le deja 30 pavitos "para hacer un recado", o descorcha botellas de vino de 100 euros para bebérsela con los amigotes mientras tu corres de punta a punta del bar asfixiado sin dar abasto.
Y ya estarái.
Como ex-camarero, voy a dar las mías:
1. Vas a echar más horas que el reloj de la catedral
2. Te van a pagar una mierda y encima tienes que dar las gracias.
3. Tu jefe SIEMPRE le va a dar la razón al cliente, probablemente humillándote delante de ellos.
4. Tu jefe SIEMPRE va a tener las cartas marcadas a su favor.
5. Tu contrato jamás reflejará las horas que echas y que cotizar debe ser un vodka ruso.
6. Muchos clientes tienen la misma mala educación que aparentan: ninguna.
7. Cuenta con que no vas a coincidir nunca con tu familia ni amigos, y de ser así estarás totalmente "descolgado" de sus vidas.
8. Y si ves que todo se enturbia, pon el móvil a grabar audio desde que entres hasta que salgas. Es por tu seguridad.
PD: No sé si se nota pero tengo unas ganas de que sea ya el juicio con ese cabronazo...
#5 añade un par de puntos mas y lo hacemos meme "decalogo de la hosteleria"
Mas razon que un santo
Aseguran que es primordial que el trabajador llegue con ganas de aprender e iniciativa. que ellos ya se encargaran de quitarselas desde el primer minuto. Tanta tontería por no pagar lo que tienen que pagar.
Ganas de aprender a cobrar poco e iniciativa a la hora de proponer tú mismo trabajar sin horario.
Regla n° 1: No dejes la botella de Terry en una partida de dominó, porque se volatiliza...
Regla n° 2: No dejes que cojan mucha confianza tus clientes, que les das la mano y te acaban estrangulando...
Para ser un buen camarero de élite en España lo que hace falta saber es sumar, restar, multiplicar, dividir e inglés chapucero a nivel B1.
España es un país que exporta universitarios cualificados e importa gente sin cualificación y a medio civilizar para que trabaje en el sector servicios en jornadas de doce horas, o más, por un plato de lentejas, o menos.
Un camarero con ganas de aprender será un camarero becario, supongo, o sea, como las palomas que tendrán que alimentarse de las migajas que se le caen al suelo a los turistas.
#1 un camarero con ganas de aprender es que trabaja de camarero para sacarse unas perrillas mientras termina sus estudios; y se termina pirando del país
#1 El manual del buen camarero dice que para ser un buen camarero es primordial que el trabajador llegue con ganas de aprender e iniciativa.
Pero el manual de la buena empresa de hostelería todavía no lo han escrito, y este manual debería decir que para ser una buena empresa de hostelería es primordial que la empresa tenga ganas de pagar lo debido.
Cada uno tiene que ser bueno en su terreno. No solo unos sí, pero otros no.
Así, los buenos camareros y las buenas empresas de hostelería se encuentran y se unen los unos a los otros.