Dos años de gestiones, nombres en clave y anécdotas como la que vivieron dos agentes cuando se hicieron pasar por comensales anónimos en el establecimiento. El precio prohibitivo de la carta les llevó a pedir un agua, una Coca-Cola y una ensalada, algo poco habitual para la clientela de un local acostumbrado a acumular coches de alta gama en el aparcamiento. “Ustedes son policías, ¿verdad?”, les recibió atento el camarero. Así fue la llamada operación Tiberiades.
Comentarios
Guionista de películas conspiranoicas detectado
“Ustedes son policías, ¿verdad?”, les recibió atento el camarero.
un restaurante ten "exclusivo" que tienen de camarero al bartolo, hoy me levante cabron.
¿todo este salseame del articulo es para hacerme creer que que los cuerpos y fuerzas de seguridad son muy cautos con los gastos?
algún juicio o caso de corrupción policial esta muy cercano.
#1
El precio prohibitivo de la carta les llevó a pedir un agua, una Coca-Cola y una ensalada, algo poco habitual para la clientela de un local acostumbrado a acumular coches de alta gama en el aparcamiento. “Ustedes son policías, ¿verdad?”, les recibió atento el camarero.
Hay que ser cutres. Estaría bien que se les hubiera escapado un capo de la mafia por no tener dinero para cenar en un restaurante de lujo.