Hace 1 año | Por Ptv27 a 20minutos.es
Publicado hace 1 año por Ptv27 a 20minutos.es

Parajes en los que hacer rutas de senderismo y deportes durante el día, y disfrutar del silencio y la paz del entorno durante la noche.

Comentarios

noexisto

Hay más sitios. Lo importante es sobre todo informarse en las webs de los parques naturales/consejerias* (yo he llegado a acampar en Cazorla durante la berrea y es la leche; además de peligroso**)
*demaisada página hay por ahi copiándo de otra que ha copiado y casi ninguna consulta fuentes originales
**En noviembre hay poca gente (nadie) y por la mañana los jabalíes lamían la tienda de campaña porque se despistaba el agua del rocio. Mejor no salir y no hacer nada de ruido

D

#1 Wooooooow, yo en mis tiemps mozos estaba todo el día de acampada por ahí, sobre todo en la fuente del cobre, pero ya me hice señor y lo tengo abandonado. Pero mi cuerpo me pide salir al verde.

noexisto

#2 Lo comentaba en plan legal; en pllan ilegal he hecho otras cosas que no describiré* por mucho que hayan prescrito lol

*No he roto nada, ni he maltratado a ningún animal, vamos

D

#3 jajjaja, yo también podría haber dicho que con 20 años nos daba igual hacer fogata o no... Luego ya creces y dejas de hacerlo, pero siempre limpiábamos todo y no destrozábamos nada aparte de nuestras neuronas.

noexisto

#4 yo eso nunca lo he hecho (a la “virulé”) y si lo he hecho ha sido con una precaución tremenda y solo para calentar una comida, no para darme Fuego (la típica a fogata que mola en una kdd)
O el tema de cristales, basura, etc (salvo mis excrementos siempre me lo he llevado todo de vuelta)

D

#5 En los primeros años pues reconozco que no nos importaba demasiado el tema de hacer fuego o no, aunque siempre tomábamos precauciones. Pero ahora no puedo evitar pensar "como cojones hacíamos eso?". Sabiendo el número de fuegos causados por este tipo de imprudencias.

Eso sí, toda nuestra mierda (literal) nos la llevábamos.

noexisto

#6 Totalmente. Un tronquito que hay ardido dura y dura más que la pila del anuncio