Las tasas jurídicas implantadas por el, entonces, ministro de Justicia, Alberto Ruíz Gallardón, establecían que la recaudación de las mismas iba destinada a financiar el servicio de asistencia jurídica gratuita. Dos años después de su implantación, los juzgados todavía están esperando que se les aporte ese beneficio ya recaudado.
"Pocos días después, durante la Asamblea de Jueces Francisco de Vitoria, el nuevo ministro dejaba aún más clara su posición afirmando que “se debe pagar por aquellos servicios públicos” que la ciudadanía recibe por parte del Estado, aunque admitía que había que hacer una “revisión” a la ley,"
ya lo pagamos con nuestros impuestos cabron, como que se debe pagar por los servicios publicos?, por eso son publicos, porque los pagamos entre todos con los impuestos para que las personas sin recursos puedan acceder a esos servicios
lo dice y se queda tan ancho, HDLGP, y paro que me enciendo
Estas tasas, primero son una injusticia total paralos que no se pueden pagar un abogado, además es una medida que restringe el uso de poder recurrir, lo cual, se elimimina la figura de justicia gratuita para todos, es decir, sólo justicia para los ricos.
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"Pocos días después, durante la Asamblea de Jueces Francisco de Vitoria, el nuevo ministro dejaba aún más clara su posición afirmando que “se debe pagar por aquellos servicios públicos” que la ciudadanía recibe por parte del Estado, aunque admitía que había que hacer una “revisión” a la ley,"
ya lo pagamos con nuestros impuestos cabron, como que se debe pagar por los servicios publicos?, por eso son publicos, porque los pagamos entre todos con los impuestos para que las personas sin recursos puedan acceder a esos servicios
lo dice y se queda tan ancho, HDLGP, y paro que me enciendo
Me hace gracia eso de que las tasas estaban para financiar la asistencia 'gratuíta'... Tasas, por supuesto, que abonaban los usuarios de la misma.
Estas tasas, primero son una injusticia total paralos que no se pueden pagar un abogado, además es una medida que restringe el uso de poder recurrir, lo cual, se elimimina la figura de justicia gratuita para todos, es decir, sólo justicia para los ricos.
Y donde está lo recaudado.
Es una auténtica barbaridad. Ya intentamos regular hasta dónde debemos tomarnos el té.