Una vez que llega el verano los niños adoran jugar con las pistolas de agua. Se trata de un juego muy divertido que pone a prueba sus habilidades motoras, su coordinación óculo-manual y con el que pueden refrescarse un poco de las altas temperaturas. Sin embargo, si queréis que los niños saquen provecho a sus pistolas de agua y no se aburran después de los primeros días, lo ideal es enseñarles diferentes juegos que les mantengan motivados y activos.
Comentarios
Llega un punto en que es IGUAL si desarrollan las habilidades cognitivo-psico-motri-sociautoreferenciales. Si es momento de juego y se lo pasan bien sin peligros ni molestar a nadie qué más da que el juego no cumpla más utilidad que la diversión. No podemos estar todo el día pensando en optimizar las capacidades en lo lúdico ni tampoco en ludificar per se el aprendizaje.
Ejercitarse jugando desarrolla un tipo de inteligencia que muchos desprecian considerandola de segunda categoría o primitiva y creo que por esa falta de relevancia en esta sociedad cada vez somos menos espabilados, mas conformistas y con menos iniciativa salvo para saciar los apetitos mas primarios