La nueva generación en biometría podría fundarse en nuestros tuits o estados de Facebook, así como todas las migas de pan que vamos dejando en nuestras redes sociales; ya hay, de hecho, una aplicación que deduce el estado anímico de los usuarios de Facebook a través del análisis algorítmico de sus mensajes, y hasta lo que escribimos en nuestro blog puede ser sujeto de análisis para conocer qué productos gustan más o menos, con objeto de afinar el diseño de nuevos productos. Con todo, el concepto de privacidad sufrirá una profunda redefinición.
Comentarios
El estado anímico es imposible de deducir en el lenguaje escrito, por mucho que los gilipollas que hacen esos programas digan lo contrario.
#3
#3 y menos en 140 caracteres
'... una aplicación que deduce el estado anímico de los usuarios de Facebook a través del análisis algorítmico de sus mensajes'
#2 https://apps.facebook.com/gnh_index/
Charlie Broker.
Por eso yo solo uso las redes sociales para trolear. Así contamino los datos de esos programas que intentan saber más de la gente.