El fotógrafo Max Siedentopf no tiene ni idea de quiénes son los dueños de los coches de las fotos. Lo que sí supo en el momento en que los vio es que necesitaban un lavado de cara urgente. Armado con unos cuantos trozos de cartón y cinta adhesiva, se lanzó a las calles de Ámsterdam en busca de los coches más normalitos. A menudo se veía obligado a trabajar con rapidez para colocar los guardabarros y los alerones personalizados antes de que alguien le viera y le preguntara qué estaba haciendo. Una vez que había tuneado todos los Peugeots,
Comentarios
#8 Pero a que estás contento!!!
#4 Bueno, consuélate, no es al único hombre al que he alegrado la mañana.
#5 Pero no cuentes lo nuestro en público...
No entiendo por qué tunea VW, si ya vienen con el motor trucado de fábrica
#3
Ven aquí que te abrace me has alegrado la mañana
Una chorrada tremenda.
#1 Es humor... aunque sea una chorrada...
Pues a mi no me haría mucha gracia ¿La cinta adhesiva no estropea la pintura?
Este no tiene pareja
Ala, ya son canis de pasta...
Menuda gracia me ha hecho en el coche, a ver lo que me cuesta homologarlo ahora
Joder que droga mas buena debe tener este hombre