Hace 3 años | Por chicotequila a vice.com
Publicado hace 3 años por chicotequila a vice.com

“Recibía muchísimos me gusta en redes sociales y retransmitía cómo ‘vivía al máximo’, pero en realidad nunca hablaba con nadie, ya fuese en la casa o en la universidad”. Testimonios de personas comunes que demuestran la verdadera vida de los influencers.

Comentarios

soychanante

Super alarmante... Nos acaban de descubrir que hay muchísimo postureo... Valiente gilipollez de artículo...

c

#2 Bueno, que no sea nuevo no quiere decir que no sea alarmante, solo que nos hemos acostumbrado.

D

Conozco una antigua compañera de trabajo que tiene una tremenda depresión desde hace años. Siempre llorando, deprimida. Una vida de mierda.

En sus fotos parece una persona contentísima y feliz.

Recuerdo una vez que se cagaba en otro compañero y cuando el le preguntó por whastapp que tal se encontraba, se pone a escribirle sonrisas y emoticonos alegres y que ok y muy bien.

Así es mucha juventud de ahora.

Preveo muchos suicidios.

c

#1 Sí, pienso que esa realidad fantasiosa no dejará nada bueno a muchos