Publicado hace 9 años por rimbod a noelialopezcheda.wordpress.com

Mi hija me dice hace poco: “Es que las mujeres somos mejores ¿verdad mamá?” El caso es que me reí por escuchar su afirmación pero no me gustó demasiado que desde tan pequeña comenzara a hacer esa distinción que impulsa a la competición. He sido una defensora a ultranza de este tema pero reconozco que…

Comentarios

Mister_Lala

#0 Te la van a hundir las feminazis

thirdman

Soy hombre blanco edad 18-49 todo el mundo me hace caso sin importar lo tontas que sean mis propuestas!

Mister_Lala

#2 Déjame adivinar: eres el líder de un partido político

S

No es competición, es complejo de superioridad fruto de tanto lavado cerebral. Yo me he cansado de mujeres que dicen ser mejores que los hombres por el mero hecho de ser mujer. Se veían a sí mismas como una entelequia más completa y compleja que nosotros, y por tanto superior.

Mister_Lala

#1 Eso es hasta que llegan a los 30 y se ven sin marido, sin casa, sin hijos y sin trabajo. Entonces se les pasa rápido la tontería. Sobre todo si ven que algunas de sus amigas tienen todo eso.

pip

- El cerebro femenino dedica un 11% más a la comunicación.

De acuerdo. ¿Entonces a qué dedica un 11% menos?

s

#6 algo explico en #10

rogerius

—Hija mía, nadie es mejor o peor. Son los actos lo que distingue. Por cierto, en adelante, evita la pregunta final porque denota inseguridad. Las mujeres somos el modelo biológico básico, el chasis de la realidad humana sobre el que se construyen las variaciones que permitirán a la especie adaptarse. Hala, chiquita, a estudiar antropología, etología o lo que quieras. Y que no te coman el coco; el mundo está lleno de tontería y apreciaciones erróneas.

Dellawerr

Pasas media vida alentando a las mujeres para darte cuenta de que te lo agradecen poniéndote etiquetas despectivas por el mero hecho de ser hombre.

D

#7 Cuando alguien crece convencido de que es una víctima da igual lo que hagas, tu siempre serás el opresor y el/ella el oprimido. Y cuando esto ocurre, se pueden desarrollar conductas que bordean la sociopatía.

Es lo que pasó en la Alemania nazi. El Holocausto no pasó porque los alemanes dijeran "somos muy muy malos y vamos a matar millones de personas, ¡que guay!". Los alemanes estaban convencidos de que ellos eran las víctimas y los judíos los verdugos, aunque estos tuvieran que llevar un brazalete que los identificara y vivieran en un ghetto.

Pasa ahora con la comunidad negra en USA y el tema de moda de Ferguson (acaban de tirotear a un par de policías en plan francotirador allí). Están convencidos de que la policía les dispara por racismo. En realidad, según las estadísticas si eres blanco y cometes un delito, es más probable que te dispare la policía que si eres negro y cometes ese mismo delito. Es decir, quienes deberían quejarse en todo caso serían los blancos. ¿Importa esto?. No. Hay una narrativa donde se ostenta la condición de víctima y a partir de ahí se pierde el contacto con la realidad.

Lo mismo ha pasado últimamente con las mujeres.

Y la culpa no es tanto de las mujeres, sino de quienes les han repetido una y otra vez que son víctimas hasta que han terminado por creerselo.

s

El cerebro femenino es: más eficiente (un 9% menor pero con la misma cantidad de neuronas),

Esto es imposible. Para que sea más pequeño debe tener menos neuronas o tener neuronas más pequeñas. Una neurona grande es rápida, una neurona pequeña es lenta.
La realidad es que no existen neuronas masculinas ni femeninas. El tamaño de las neuronas humanas está optimizado para la máxima capacidad intelectual, a diferencia de un gato que tiene neuronas muy grandes y reacciones muy rápidas.

Las mujeres tienen un cerebro más pequeño porque pesan menos. Tampoco hay tanto misterio. La capacidad mental no depende del tamaño, o los elefantes serían unos genios y las ballenas serían nuestros amos.

dedica un 11% más a la comunicación,

Creo que es bastante más. Las zonas del cerebro que se activan cuando habla una mujer, no solo son más, sino que sobretodo son distintas. Hablar es una acción diferente, ni siquiera parecida, para un hombre y para una mujer.