Una madre de Illinois engañó hasta a sus cinco hijos cuando fingió cáncer de ovarios para recolectar fraudulentamente $35,000 en un periodo de dos años, alegaron las autoridades.
#1 El único karma cabrón es el de Menéame. El otro no existe. Al menos, en vida.
Anda que no conozco yo a buenas personas que han fallecido de cáncer demasiado jóvenes y auténticos hijos de la gran puta que siguen vivos, sin sufrir y siendo unos ancianos.
Yo creería en un karma aplicado a la reencarnación.
#1 " Pues que sepa que el karma es muy cabrón, que no le extrañe si alguna vez le ocurre de verdad. "
Lamentablemente el karma no existe, si existiera nuestro mundo seria perfecto. En ese mundo los buenos serian premiados y los malos castigados, pero el mundo real es completamente opuesto a ese porque lo forma gente como nosotros que solemos premiar al malo y castigar al bueno ( los ultimos obviamente cada vez son menos )
El karma somos nosotros, como en Meneame.
#6 Para cuando tu abuelo se había hartado de esperar y se encendía el cigarro para relajarse, ya había pasado el plazo de frecuencia de esa línea de autobús, por eso justo llegaba.
Comentarios
Pues que sepa que el karma es muy cabrón, que no le extrañe si alguna vez le ocurre de verdad.
#1 El único karma cabrón es el de Menéame. El otro no existe. Al menos, en vida.
Anda que no conozco yo a buenas personas que han fallecido de cáncer demasiado jóvenes y auténticos hijos de la gran puta que siguen vivos, sin sufrir y siendo unos ancianos.
Yo creería en un karma aplicado a la reencarnación.
#1 " Pues que sepa que el karma es muy cabrón, que no le extrañe si alguna vez le ocurre de verdad. "
Lamentablemente el karma no existe, si existiera nuestro mundo seria perfecto. En ese mundo los buenos serian premiados y los malos castigados, pero el mundo real es completamente opuesto a ese porque lo forma gente como nosotros que solemos premiar al malo y castigar al bueno ( los ultimos obviamente cada vez son menos )
El karma somos nosotros, como en Meneame.
#5 también dicen que Murphy no existe y cada vez que mi abuelo se encendía un cigarro esperando al autobús, este siempre venía al momento.
#6 Para cuando tu abuelo se había hartado de esperar y se encendía el cigarro para relajarse, ya había pasado el plazo de frecuencia de esa línea de autobús, por eso justo llegaba.
#7 que va, te decía: "Quieres que venga el autobús ya? Mira". Y te juro que funcionaba.
Joder, pobres críos hacerles pasar por eso...
Hay que tener ovarios...