Hasta 2012, los únicos escándalos que habían salpicado a Juan Carlos I eran de tinte amoroso o relacionados con sus numerosos accidentes. Sin embargo, ese año, apenas un poco después de que el 12 de diciembre de 2011 se viera obligado a aparta al duque de Palma, Iñaki Urdangarin, de las actividades oficiales por su "conducta no ejemplar" en el "caso Nóos", la corrupción empezó a salpicar directamente a quien hasta ese momento ostentaba el título de salvador de la democracia por su actuación en la noche del 23-F.
Comentarios
Estos artículos olvidan que el rey es el delincuente y la víctima somos nosotros.
#5 de sobra
¿Juan Carlos I? ¿quién es ése?
Ahm ya , un Rey que tuvo España y nada tiene que ver con la actual Institución monárquica
#1 Huir como Puigdemont es de cobardes, huir como el emérito es de valientes.
#1 Si, al que el dictador Franco nombro como su sucesor a titulo de Rey, y que juro sobre los principios del Moviemiento Nacional Fascista
#3 a mí me da igual el que lo pusiera, la institución en sí me da sarpullidos
#3 #4 Entendéis que mi comentario era sarcasmo ¿verdad?