En 1690 la recientemente coronada reina Mariana de Neoburgo llegó a España para conocer a su marido, el rey Carlos II de Austria. Pero un accidente al poner el pie por primera vez en territorio español acabó bautizando una piedra de la ría de Ferrol como “o cu da raíña”, “el culo de la reina” en castellano.
Puede que ocurriera, aunque hay dos versiones. En cualquier caso como mencionan ocurría la guerra de los nueve años y por eso había peligro naval. Tardaron por temas bastantes días en poder desembarcar y o bien la reina se aburría y pidió que la pusieran ahí a meditar (caprichos de renia, esta es la versión que me contaron cuando era pequeño) o bien fuera de la ría en un momento intuyeron una amenaza naval y por si el barco se hundía en una batalla la pusieron ahí a resguardo.
Puede que ocurriera, aunque hay dos versiones. En cualquier caso como mencionan ocurría la guerra de los nueve años y por eso había peligro naval. Tardaron por temas bastantes días en poder desembarcar y o bien la reina se aburría y pidió que la pusieran ahí a meditar (caprichos de renia, esta es la versión que me contaron cuando era pequeño) o bien fuera de la ría en un momento intuyeron una amenaza naval y por si el barco se hundía en una batalla la pusieron ahí a resguardo.
#7 ¿Para España? ¿Para Europa? ¿Para las colonias?
De todas formas no sé... ese inconfundible labio leporino muy y mucho austria no lo hubiera tenido el infante. Igual no colaba con una genética agena algo no endogámica
#8 Y es un retrato real, que se supone que además favorecían a la persona. El verdadero Carlos II debía ser aún peor y da miedo pensar qué heredero podría haber salido de alguien en ese estado.
Comentarios
Deberían poner una foto al menos...
#2 no acabo de pillar por que si vas a desembarcar lo haces en una piedra que está en mitad del agua. Que sentido tiene? No será una leyenda?
#5 Ya... a ver es que no está bien explicado.
Puede que ocurriera, aunque hay dos versiones. En cualquier caso como mencionan ocurría la guerra de los nueve años y por eso había peligro naval. Tardaron por temas bastantes días en poder desembarcar y o bien la reina se aburría y pidió que la pusieran ahí a meditar (caprichos de renia, esta es la versión que me contaron cuando era pequeño) o bien fuera de la ría en un momento intuyeron una amenaza naval y por si el barco se hundía en una batalla la pusieron ahí a resguardo.
Bueno, al menos con los vestidos que se llevaban por entonces algo se habría amortiguado su caída.
Según Wikipedia al menos, no tenía además demasiada buena fama en la corte por altanera y antipática.
En la provincia de Cádiz hay una barriada llamada Meadero de la reina, en conmemoración de la meada que allí echó Isabel II en 1862
http://ocadizdigital.es/noticia/c%C3%A1diz/el-meadero-de-la-reina
#9 Meno, e o carallo vintenove en Santiago. Tampouco é pra fardar agora de cousas que sempre gaña Galiza
La de problemas que de hubieran solucionado para España si la reina se hubiera echado un amante para estos casos.
#7 ¿Para España? ¿Para Europa? ¿Para las colonias?
De todas formas no sé... ese inconfundible labio leporino muy y mucho austria no lo hubiera tenido el infante. Igual no colaba con una genética agena algo no endogámica
#8 Y es un retrato real, que se supone que además favorecían a la persona. El verdadero Carlos II debía ser aún peor y da miedo pensar qué heredero podría haber salido de alguien en ese estado.
#0 Ejemactualidad...
#3 Actualidad... o sociedad