Nos señalan a todos como culpables para hacernos pagar su capitalismo verde, del mismo modo que ya pagamos su crisis financiera. La jugada puede resultar peligrosa, no están faltando las voces ultraderechistas y populistas que están pescando en el río revuelto de una población indignada con que se les haga pagar por un daño al planeta que ellos no están provocando.
Este es el discurso erróneo. Sí, los ricos contaminan más. Sí, la mayor parte de la contaminación la generan las grandes empresas (a las que les compramos todos lo que venden, faltó decir). Sí, es un sinsentido que hagan una convención para combatir el clima y lleguen todos en jet privado.
Pero el discurso es erróneo porque nos desvía de lo principal, que no es la lucha contra los ricos derrochones. Porque ese problema lleva siéndolo milenios, y no hemos encontrado solución. El de ahora es un problema real, de hace unas décadas, y no tenemos tiempo para andar discutiendo que si los ricos, que si los chinos, que si los americanos...
De todas formas, mis esperanzas son cero. Porque a la gente le señalan el sol y mira el dedo.
#2 Honestamente no sé que pensar, por una parte coincido contigo en que se puede interpretar como un desvío del objetivo, pero dejar que quienes tienen más responsabilidad marquen esos objetivos es engañarse, y desincentivar a quienes se dan cuenta del engaño.
Las estrategias de las grandes corporaciones se diseñan por expertos en la materia, y son difíciles de desenmarañar, y están enfocadas en que nos sintamos responsables del problema, combatirlos es correr el riesgo de que la mayoría se desentienda o perciba inútil su aportación. Un win-win que dirían esos expertos que trabajan para las corporaciones.
Me parece interesante el artículo porque desenmascara a muchos, aunque se corre el riesgo de desenganchar del problema a otros. De todos modos es mejor saber quiénes son y, como digo, desenmascararlos.
Comentarios
El capital gana mas con las crisis que sin ellas.
Nosotros vemos una crisis climática, ellos una oportunidad de negocio, y de meternosla doblada
Este es el discurso erróneo. Sí, los ricos contaminan más. Sí, la mayor parte de la contaminación la generan las grandes empresas (a las que les compramos todos lo que venden, faltó decir). Sí, es un sinsentido que hagan una convención para combatir el clima y lleguen todos en jet privado.
Pero el discurso es erróneo porque nos desvía de lo principal, que no es la lucha contra los ricos derrochones. Porque ese problema lleva siéndolo milenios, y no hemos encontrado solución. El de ahora es un problema real, de hace unas décadas, y no tenemos tiempo para andar discutiendo que si los ricos, que si los chinos, que si los americanos...
De todas formas, mis esperanzas son cero. Porque a la gente le señalan el sol y mira el dedo.
Don't look up.
#2 Honestamente no sé que pensar, por una parte coincido contigo en que se puede interpretar como un desvío del objetivo, pero dejar que quienes tienen más responsabilidad marquen esos objetivos es engañarse, y desincentivar a quienes se dan cuenta del engaño.
Las estrategias de las grandes corporaciones se diseñan por expertos en la materia, y son difíciles de desenmarañar, y están enfocadas en que nos sintamos responsables del problema, combatirlos es correr el riesgo de que la mayoría se desentienda o perciba inútil su aportación. Un win-win que dirían esos expertos que trabajan para las corporaciones.
Me parece interesante el artículo porque desenmascara a muchos, aunque se corre el riesgo de desenganchar del problema a otros. De todos modos es mejor saber quiénes son y, como digo, desenmascararlos.